La decoración slow es más que una tendencia, es un estilo de vida que promueve la tranquilidad, la consciencia y el disfrute del momento. Este enfoque se refleja en cómo nos vestimos, cómo nos enfrentamos al mundo y, por supuesto, cómo decoramos nuestro hogar. En este artículo, te ofreceremos una guía detallada para transformar tu terraza en un oasis de relajación, siguiendo los principios de la decoración slow.
La Esencia de la Decoración Slow
La decoración slow se caracteriza por su enfoque en la conexión con la naturaleza, la tranquilidad y la sostenibilidad. Los colores neutros, los materiales naturales, los muebles de madera y las piezas artesanales son elementos clave en este estilo de decoración.
Muebles: Menos es Más
En la decoración slow, los muebles son esenciales para transmitir la filosofía de vida que representa. Para lograrlo, debemos optar por muebles que reflejen la naturaleza en nuestro espacio, como sillas de madera, ratán o fibras naturales. Los muebles de aluminio o hierro, aunque son comunes en los espacios al aire libre por su facilidad de mantenimiento y limpieza, no transmiten la sensación que buscamos con nuestra decoración.
Colores: La Importancia de la Luz
Los colores que predominan en la decoración slow son los blancos y los crudos. Estos tonos aportan claridad a la estancia y aumentan la sensación de desconexión y relajación. Podemos incorporar estos colores no solo en nuestras paredes, sino también en los textiles con los que vestimos la terraza.
Textiles: Confort y Calidez
Para añadir un toque de confort a nuestra terraza, es buena idea colocar cojines mullidos en los asientos. Esto nos permitirá disfrutar de largas horas de lectura o meditación. También podemos recurrir a hamacas, siempre y cuando el espacio lo permita. Las mantas son otro elemento a considerar, ya que siempre es conveniente tener una a mano para evitar pasar frío.
El Macramé: Un Toque de Elegancia
El macramé es un elemento que aporta un toque distintivo a la decoración slow. Este arte de anudar hilos o cuerdas se ha convertido en una de las tendencias del momento. En la decoración slow, encontraremos adornos de macramé que van directamente sobre las paredes, aportando un toque de elegancia y sofisticación a nuestro espacio.
La decoración slow es una filosofía de vida que se refleja en la forma en que decoramos nuestro hogar. Al aplicar estos principios a la decoración de nuestra terraza, podemos crear un espacio de relajación y paz que nos permita disfrutar del momento y conectar con la naturaleza. Recuerda, la clave está en los detalles: los colores neutros, los materiales naturales, los muebles de madera y las piezas artesanales son los elementos que definen este estilo de decoración.